Conoce cuán importante es escoger una buena malla pollera para nuestros criaderos
Las mallas polleras también llamadas mallas avícolas, tienden a ser un recurso esencial en las granjas enfocadas en la crianza de aves de corral o en la obtención de subproductos como, por ejemplo, las granjas donde se crían las gallinas para el consumo o las granjas de gallinas ponedoras de huevos. Cuando utilizamos una buena malla pollera reducimos problemas constantes de las granjas de pollos que pudieran perjudicar nuestras aves en sus procesos de crianza como, cuando ingresan en las granjas aves externas que pueden traer consigo enfermedades que nos pueden causar pérdidas abrumadoras en el corral ya que, estas aves traen desde el exterior problemas fitosanitarios, gripe, salmonela, entre otros. A parte de traer consigo un buen número de enfermedades, los pájaros que ingresan a los corrales de engorde o de crianza consumen el alimento que está destinado en transformarse en kilos de carne apto para la venta, y por ende afectan la rentabilidad de la granja avícola o porcina, causando pérdidas a largo plazo.
¿Que es la malla pollera y que diferencia tiene con otras mallas?
Algunos se preguntarán que es una malla pollera, pues si su nombre no deja una gran y clara pista de su función, les respondo, es un cerco que se realiza para los gallineros pérsicamente para el área establecida donde se realizara la crianza de pollos, los cuales serán retenidos en esa área hasta alcanzar la madurez necesaria para su sacrificio o para su traslado a un área de mayor tamaño según las necesidades que presenten.
Cuando decidimos iniciarnos en la producción y consumo de aves de corral, ya sea en pequeña o gran escala entre los materiales y recursos necesarios podemos encontrar las mallas polleras, sin embargo, las personas menos experimentadas deliberan cual importante puede llegar a ser el tipo de malla, modelo, marca o incluso el material del que este echa la malla.
Las mallas polleras, aunque son necesarias no son objeto de preocupación para los avicultores pues, en muchos casos ellos utilizan como cerco lo que tienen a la mano, tablas madera, enrejados, placas metálicas de gran tamaño y alambrados de otros tipos no propios para gallineros. Esto les permite economizar en la inversión de sus grajas, pero a su vez puede traer riesgos para sus animales, estos riegos pueden presentarse como heridas que posteriormente pueden convertirse en focos de infección llevando a sus animales a estados graves de saludo o incluso a la muerte.
Si consideramos estas situaciones anteriormente mencionadas, no es de extrañar que en las granjas avícolas “primerizas”, se estimen pérdidas de entre el veinte y treinta por ciento en los periodos de crianza, sin embargo, aunque esto pueda sonar contradictorio la carencia de las mallas polleras no es sinónimo de fracaso, pero la utilización de ellas si minimiza los riegos. Por lo general si no utilizásemos mallas de gallinero como, cercos de alambre o cualquier otro material que no esté destinado para las granjas de pollos, observaríamos que estos animales pueden pasar fácilmente entre las separaciones existentes en el enrejado al igual que si utilizásemos placas de madera, laminas metálicas el resultado sería negativo a largo plazo.
La utilización de recursos que pudiesen oxidarse o descomponerse por la humedad y que además impidan la circulación del aire dentro del lugar puede generar problemas a largo plazo para las aves. Aunque yo casi siempre recomiendo reutilizar materiales para realizar nuestros proyectos, existen ocasiones donde no se deben escatimar en gastos ni dejar de lado los materiales únicos diseñados para su uso específico, las mallas polleras, cuya forma y tamaño fueron diseñadas para la crianza de aves de corral, cerdos y jaulas pajareras.
¿Que malla pollera es mejor de las que se consiguen en el mercado?
El mercado puede abrumarnos con distintos tipos de mallas polleras variando entre sus modelos, marcas, formas e incluso el material del que estén hechas, pero solo especificándole al vendedor que queremos una malla para criar pollos, él nos deberá ofrecer un tendido de malla metálica o plástica, que se vende por metros de longitud y que por lo general tiene una medida estándar de ancho cuyos espacios son ideales para la circulación de la luz y el aire, mas no permiten que los pollos puedan escapar por entre la malla.
Actualmente es común encontrar mallas de plástico color verde con pequeños espacios cuadrados, aunque también encontramos las mallas de metal galvanizado o recubiertas de plástico con espacios romboidales, estas últimas son las más tradicionales y económicas que se pueden encontrar.
A pesar de tantas opciones no puede ser cualquiera malla, porque entre ciclos las casillas o casetas deben ser desinfectadas con químicos y vapor, y estos agreden las mallas polleras metálicas tradicionales. También hay que considerar que las heces de las gallinas y otras aves de corral son altamente acidificas y pueden corroer el metal en pocos meses de uso, por ende, la alternativa ha sido remplazar las mallas polleras cada vez que estas pierden su resistencia, también una opción, aunque un poco más costosa es conseguir las mallas plásticas o de alambre plastificado.
En otras palabras al iniciarnos en el mundo de las grajas avícolas debemos considerar cuanto estamos dispuestos a invertir, ya que, si nuestra meta es iniciar de la forma más eficiente, lo mejor es adquirir un malla pollera fabricada de polipropileno que por lo general son de color negro, estas son altamente resistente a la humedad y al pH de los excrementos de los animales de granja, son consideradas de las mejores en el mercado, así que durará varios años sin necesidad de ser sustituidas y claro al ser de plástico es mucho más fácil y rápida su instalación y no lastima los animales ni a los trabajadores durante sus fases de instalación y mantenimiento, un recurso tan esencial cono las mallas polleras deben ser de un material per dure y por lo tanto yo recomiendo estas.
